Yamaha Robotics ofrece una automatización flexible que aumenta la producción del cliente
El sistema de transferencia lineal LCMR200 aumenta la fiabilidad en la producción de piezas de automóvil e introduce una flexibilidad preparada para el futuro para hacer frente a las cambiantes demandas del mercado.
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La división de automatización de Yamaha Motor Robotics ha conseguido un aumento del 10 % en la producción de un cliente que fabrica piezas de automóvil, al sustituir los transportadores convencionales por un sistema compuesto por módulos LCMR200.
El cliente eligió el LCMR200 para superar un reto específico en la fábrica al eliminar un gran número de sensores de posición y topes electromecánicos necesarios para controlar sus transportadores existentes. Estos transportadores sufrían habitualmente unas 15 breves paradas al día debido a fallos en los componentes. Aunque se arreglaban fácilmente en tan solo unos minutos en cada ocasión, a menudo requiriendo un simple comando de reinicio, la pérdida total de tiempo productivo por turno afectaba notablemente a la productividad general.
El equipo de producción inició un proyecto para aumentar la producción evitando las paradas causadas por las cintas transportadoras, buscando equipos nuevos y más fiables capaces de funcionar de forma continua durante períodos prolongados. Tras analizar el mercado, el equipo descubrió que el LCMR200 es muy apreciado por muchas empresas que se enfrentan a retos similares. Después de concertar una demostración con Yamaha, quedaron impresionados con el diseño que minimiza el número de dispositivos de accionamiento y sensores, al tiempo que garantiza un control exacto y preciso. La arquitectura sencilla del LCMR200, basada en motores lineales programables y controlados electrónicamente, garantiza una fiabilidad excepcional.
Los módulos LCMR200 eliminaron las causas de las averías de las cintas transportadoras, transformando la productividad.
Como sistema modular para el transporte de piezas en líneas de producción automatizadas, el LCMR200 transfiere las piezas de forma rápida y eficiente entre los diferentes procesos necesarios para ensamblar y empaquetar todo tipo de productos, especialmente piezas pequeñas de ingeniería como los componentes de automoción de este ejemplo. Los módulos son igualmente adecuados para líneas de producción manuales con trabajadores humanos y para la producción parcial o totalmente automatizada, ofreciendo un funcionamiento rápido, silencioso y seguro. La velocidad, la aceleración/desaceleración, las posiciones de parada e incluso la dirección son programables, lo que permite una rápida configuración, así como flexibilidad para adaptarse a los cambios en las demandas de fabricación.
Los módulos LCMR200 son fiables, rápidos y.
El equipo de producción de componentes de automoción decidió rápidamente que el LCMR200 era el camino a seguir para aumentar la producción y satisfacer las necesidades de sus exigentes clientes. Yamaha trabajó con el equipo para garantizar un proyecto sin problemas e introdujo un integrador de sistemas con las habilidades necesarias para crear una línea de producción totalmente diseñada para sustituir la producción convencional basada en cintas transportadoras por el LCMR200.
Ahora en funcionamiento, la nueva línea de producción ha demostrado una fiabilidad del 100 %, eliminando por completo las paradas frecuentes que resultaban tan perjudiciales en el pasado. Trabajando con la misma velocidad de línea y tiempos de ciclo de proceso que antes, la nueva línea está produciendo 5400 unidades adicionales al mes. Eso supone un aumento del 10,3 % en la producción, simplemente a través de un mayor tiempo de actividad.
El LCMR200 tiene más rendimiento que ofrecer a medida que el equipo se familiariza con la nueva línea de producción. La velocidad máxima de 2,5 m/s permite tiempos de transferencia mucho más rápidos que las cintas transportadoras, en una amplia variedad de escenarios industriales. La longitud de la línea puede escalarse aumentando o disminuyendo el número de módulos. Las conexiones mecánicas y eléctricas son rápidas de instalar y los transportadores tienen identidades individuales que permiten conectar y controlar hasta 64 unidades simultáneamente. La altura total del módulo y del transportador es de 109 mm, lo que permite un perfil bajo, mientras que el ancho total de 175 mm asegura que la línea de producción instalada tenga un tamaño compacto.
El sistema LCMR200 permite una instalación rápida y sencilla.
Hay disponibles módulos especiales para la circulación y el desplazamiento que permiten a los integradores construir líneas de producción compactas y permitir la ramificación o el adelantamiento para cambiar la secuencia de los procesos si es necesario. Esto puede ser útil, por ejemplo, si el espacio de la fábrica es extremadamente limitado, o si las piezas de producción individuales deben desviarse para procesos especiales como la personalización o la aplicación de opciones especificadas por el cliente. Los transportadores pueden transportar hasta 30 kg y su alta rigidez permite que los procesos de producción se realicen directamente en el módulo. Esto puede ahorrar la extracción y devolución de piezas de trabajo a los deslizadores, lo que permite tiempos de ciclo rápidos y eficientes, así como minimizar los costes de ingeniería y herramientas.
El sistema de transferencia lineal LCMR200 admite el montaje manual o automatizado y permite el funcionamiento directamente en los transportadores.
«La estrecha colaboración entre Yamaha, el integrador de sistemas y el cliente permitió ofrecer una solución rápida y fiable que cumplía totalmente los requisitos de producción ininterrumpida, aumento de la producción y mayor productividad», afirmó Tatsuro Katakura, director de ventas de la división de FA (Factory Automation) de Yamaha Motor Robotics Europe. «Además, el LCMR200 ofrece muchas ventajas adicionales a este cliente a medida que se familiariza con él y explora todo su rendimiento y flexibilidad. Estoy seguro de que consolidarán sus planes futuros en el LCMR200 a medida que evolucionen y amplíen sus líneas de productos e introduzcan nuevos procesos de producción en el futuro».
«Además de ofrecer una enorme fiabilidad, el sistema LCMR200 también es sumamente flexible y puede ayudar a los propietarios a afrontar los diversos retos a los que se enfrentan todas las empresas a lo largo del tiempo, como la introducción frecuente de nuevos productos, la expansión del mercado y los cambios tecnológicos», concluyó.
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